Tal vez, hay veces que nos dejamos llevar por esos mitos que van diciendo por ahí de los signos del Zodiaco. Es más fácil creernos lo que nos dicen los demás, antes que pararnos a conocer a Piscis en profundidad y ver si eso es verdad o simplemente es un falso mito. Pero, también hay verdades “universales” sobre Piscis. Aquí van 3 mitos y 3 verdades de Piscis:
MITO 1: Piscis es una persona muy pesimista y dramática.
Bueno, un poco dramático Piscis si que es, tampoco demasiado, pero pesimista no es. Todo lo contrario, es una persona tan soñadora que hay veces que tiene muy altas las expectativas y eso es lo que le hace no poder aceptar bien la realidad. No es pesimista, si no que simplemente a veces se ahoga en un vaso de agua y le cuesta mucho salir de ahí. Cuando algo malo le sucede, le cuesta mucho fijarse en lo bueno, le cuesta mucho buscar fuerzas para salir hacia delante. En momentos así lo único que necesita es rodearse de su gente y encontrar apoyo en las personas a las que ama.
VERDAD 1: Piscis siempre consigue tener las mejores relaciones emocionales.
Podría decirle que Piscis es uno de los signos más emocionales y más sensibles del Zodiaco. A nivel emocional, tiene las mejores relaciones. Conecta muchísimo con los demás, ya sea con su pareja, con sus amigos o simplemente con un desconocido. No le hace falta preguntarte qué te pasa, para saber qué es lo que está sucediendo dentro de ti. A Piscis le sobran las palabras. Con una mirada, ya lo sabe absolutamente todo. Su nivel de empatía es tan alto que incluso a veces puede llegar a sufrir viendo como los demás sufren…
MITO 2: Piscis es demasiado bueno e inocente.
Eso es simplemente la imagen que da, porque luego en el fondo, no es así. Tiene un lado muy oscuro, un lado rebelde que muy pocos conocen. Si, es amable y siempre está pendiente de los demás, pero como su intuición le diga que algo va mal, es el primero en sacar uñas y dientes para defender lo que es suyo. Puede parecer muy paciente, pero en realidad esa serenidad y tranquilidad es capaz de desaparecer de un momento a otro. Piscis de tonto no tiene ni un pelo, aviso para todos aquellos que estuvieran pensando aprovecharse de él/ella.
VERDAD 2: La intuición es y será siempre su mejor amiga.
Y es que gracias a esa intuición se salva de muchas… Piscis es como la brujita del Zodiaco, siempre lo sabe antes de que suceda. Siempre sabe las cosas antes de que nadie se lo diga. Es algo que no puede explicar con palabras, es una sensación, es algo que siente y que le avisa cuando algo no va como debería de ir. Si en alguien confía de verdad Piscis es en su intuición. Siempre se deja llevar por lo que ella le dice y siempre le hace caso. Piscis siempre escucha a su intuición, antes que escuchar a su razón o a sus emociones. Y eso es algo que no se puede negar.
MITO 3: Le cuesta mucho ponerse a hacer las cosas y le encanta procrastinar.
La gente dice por ahí que es uno de los signos más vagos del Zodiaco, pero en realidad no es así. Le cuesta mucho ponerse a hacer las cosas cuando algo no le gusta. Cuando se trata de obligaciones o de responsabilidades, es el primero en procrastinar. Pero si algo se le mete entre ceja y ceja a Piscis, es el primero el levantarse y en ponerse a trabajar duro por ello. Como algo le guste realmente a Piscis, no habrá nada ni nadie que le impida luchar y poner todos sus esfuerzos en ello.
VERDAD 3: Es muy generoso y muy romántico.
Totalmente cierto. Y a veces es tan generoso que lo es con quién no debería de serlo. Pero es que le nace de dentro. Piscis por su gente hace cualquier cosa. Es de esos que pone las necesidades de los demás por encima de las suyas. Y luego muchas veces se arrepiente, porque se da cuenta de que, a la hora de la verdad, cuando Piscis necesita ayuda, son pocas las personas que están a su lado, pero no puede evitarlo. Es algo con lo que nace y con lo que Piscis muere. Y lo de romántico también es totalmente cierto. Le encanta vivir el amor como si estuviera viviendo en una comedia romántica. Le encantan los pequeños detalles, las sorpresas inesperadas, los mensajes a altas horas de la madrugada.
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