Cuando Sagitario se enamora, no pierde el tiempo. Vamos, de hecho es un signo que no pierde el tiempo NUNCA. No es de esos que va marearte un día sí y al siguiente no. Se deja de estupideces y siempre arriesga con muchísima valentía. ¿Y cómo demuestra Sagitario que está enamorado de ti? Aunque por dentro le tiemblen las piernas más que nunca, Sagi lo arriesga hasta que no le queden más oportunidades. No es una persona que se caracterice por fingir todo lo que siente. No es alguien que disfrute jugando con corazones ajenos. Por eso, todo lo que suelte por su boca es 100% real.
Para bien o para mal, Sagitario siempre se muestra tal y cómo es. Cuando se enamora localmente, no hace falta que lo diga, porque sus acciones lo cuentan todo. No hará nada que no sienta solo por pura obligación. Si no siente pasión, no finge solo para pasar el rato. Cuando apuesta por ti, es porque has conseguido llegar hasta su tesoro más preciado: su corazón. Si has llegado hasta allí, tienes la verdadera lotería entre las manos. Llegar a esa parte de Sagitario no es tarea fácil. Se nota cuando Sagitario está loca/o de amor porque NO PARA. Literal.
Si ya de por sí es un torbellino, no te puedes ni imaginar la cantidad de adrenalina que guarda dentro cuando hay pasión. Duerme menos, tiene más energía en el cuerpo, más ganas de experimentar, de viajar, de conocer, de descubrir… Sagitario derrocha energía aunque por dentro esté cayéndose de sueño. Derrocha más simpatía de la habitual e inspira mucha buena vibra cuando le gusta alguien. Su sonrisa brilla mucho más, sus ganas de hacer locuras por su cuenta disminuyen y aumentan sus ganas de hacer locuras en conjunto.
Está claro que la locura no desaparece, al contrario, la locura la comparte. Como todo lo que tiene. El amor a Sagitario hace que despierte muchas envidias. ¿Por qué? Porque cualquier querría formar parte del corazón de Sagitario. No envidiar esa luz tan especial sería de locos.