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Los últimos días han sido un poco difíciles para ti, Tauro. Había algo que te impedía concentrarte y que te impedía prestarle atención a lo que era importante. Era como que tu mente vagaba por lugares que ni siquiera tú conocías. No podías concentrarte en tu trabajo, en tu vida, en tu día a día. Pero tranquilo, todo esto tiene una explicación. El día 5 de octubre Venus estaba en retrogrado y eso era lo que te hacia sentirte así. Ha sido un tiempo de introspección, y aunque a veces te sentías perdido, has podido conectar con tu yo interior. Ahora que ya sabes cuál era el motivo de todo lo que te estaba pasando, es importante que te calmes, Tauro.
Respira hondo y aprovecha ese carácter tan paciente que tienes. A partir de ahora tienes que mirar hacia afuera y dejar de preocuparte por cosas que ya no tienen importancia.
Esta bien que tengas unos días en los que no te apetezca hablar con nadie o ni siquiera te apetezca salir de casa. Pero solo un par de días, no más. Oblígate a salir al exterior y a relacionarte con los demás. Ponte las pilas, Tauro, porque si te quedas metido en la cama no vas a solucionar nada. El día 9 hubo luna llena y te dio el empujón perfecto que te faltaba. Te dejó toda esa energía que necesitabas para hacer eso que tanto tiempo llevas deseando hacer. Para volver a esos hábitos que te hacen sentirte pleno y lleno de entusiasmo.
Es importante que aproveches toda esa energía que te ha dejado la luna llena en algo positivo y no en lamentarte por aquello que no pudo ser. Aprovecha esa energía para hacer eso que te hace ser quién tú eres.
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