Si has nacido el 16 de septiembre, puedes mostrarte como la persona más paciente, pero en el momento que te fastidian te marchas sin despedida y no te vuelven a ver la cara. Has aprendido a reconocer que hay quienes no merecen la pena, que darles demasiada energía es sinónimo de agotamiento para tus emociones y ya no estás dispuesto a lidiar con conflictos innecesarios. Desde la infancia te has apegado a todo aquello que te dé paz, el niño al que el resto llamaba raro, sólo porque no se conformaba, porque se organizaba y porque pensaba en un futuro prometedor.
Eres Virgo y es por ello que no te cuesta tomar las armas necesarias para lanzarte al ruedo, inclusive cuando sientes que el miedo te recorre de pies a cabeza. A veces, no hay más, tienes que tomar el riesgo o conformarte, pero lo último nunca ha ido bien con tu personalidad. Es claro que no eres alguien conflictivo, pero eso no quiere decir que vas a permitir que te traten a su antojo. Te ha costado trabajo, pero ahora pones límites y no dejas que te traten con la punta del zapato.
Lo bueno es que tienes tus metas tan bien establecidas que ni siquiera la mala vibra te hace perder la persistencia, sabes que en el camino tendrás uno y mil obstáculos, así que estás preparado para eso y más. Pues, la vida te ha enseñado que cada victoria requiere una batalla y que por más que implores nada te va a caer del cielo. Sales a luchar por todos esos pensamientos que un día inundan tu mente y desde hace tiempo te dejó de importar la opinión del resto. Si nadie cree en ti, adelante, pero no vas a bajar tu nivel de energía sólo para darles gusto.
Los nacidos el 16 de septiembre, son perfeccionistas, si en el fondo saben que harán las cosas mal, prefieren no hacerlas. Necesitan tiempo y dedicación, para hacer todo de una forma minuciosa. Como compañero eres firme, sabes que no estás aquí para solucionar los bajones emocionales de nadie, pero…si puedes ayudar a alguien en el camino, lo haces sin esperar nada a cambio. Tú sabes que a veces sólo se necesita escuchar una palabra o recibir un abrazo para seguir adelante.
No obstante, los lazos que llegues a crear con alguien, nunca son una excusa para evadir responsabilidades, sabes muy bien cómo separar lo personal del trabajo y eso te ha ayudado a mantener el equilibrio pase lo que pase. Por otro lado, eres muy selectivo, no vas por ahí compartiendo tus secretos con el primero que te sonríe bonito. Necesitas un vínculo que comparta tus mismos intereses, que sea capaz de comprender que lo que le dices no es juego y que te demuestre que estará en las buenas y en las malas.
Es claro que no todo en tu personalidad es como un montón de algodones de azúcar, hay momentos en los que te vuelves amargo para los que te rodean e incluso tú mismo te llegas a poner una traba tras otra por lo mismo. Para empezar, puedes llegar a ser sumamente superficial, te importa mucho tu apariencia y no quieres verte involucrado con personas que la manchen. Eso sin contar que eres exigente hasta los huesos, parece que sólo estás esperando un mínimo error para agudizarlo y, es peor cuando se trata de ti, no eres nada compasivo contigo.
Tu símbolo astrológico es la Virgen, es quien llena de persistencia cada uno de tus pasos. De igual manera, es la elegancia, la manera en que te desenvuelves de forma sigilosa sin causar un sólo problema, sólo esforzándote en lo que quieres lograr. Es la confianza con la que te enfrentas a la vida. Tu elemento es la Tierra, es quien marca el principio y el fin, tu equilibrio, tu fortaleza y tu conciencia. Tu planeta regente es Mercurio, es quien simboliza tu parte viajera, la que no tiene miedo a decir lo que siente y mucho menos mostrar sus dotes inteligentes. Por su parte, la numerología dice que tus números de la suerte son el 1, 5, 12, 13 y 20.
Si has nacido el 16 de septiembre, eres un amante compasivo, refinado y dispuesto a dar lo más profundo que hay en su corazón. No obstante, vas con cautela, no te entregas a la primera, necesitas experimentar esa sensación de que todo está bien y que vale la pena lanzarse al precipicio aunque sientas que el corazón se te hará pedazos. Quizás no seas el ser más romántico del mundo, porque eres de los que siguen su parte lógica por encima de todo. Digamos que entre más práctico mejor, pero lo que sí hay que dejar claro es que lo desleal no es lo tuyo. Si se trata de comprometerse lo haces sin darle tantas vueltas.
Tu color de la suerte es el azul marino, el color que representa a los que prefieren ser un tanto conservadores antes de caer en el libertinaje y tomarse toda la vida a juego. Es el tono de los que no le temen a la introspección, de los que reflexionan y después llevan a cabo. El azul marino es de los complicados que valen mucho más que la pena.