Si has nacido el 30 de junio, eres un alma valiente, de las que parecen que no rompen ni un plato, porque en realidad no vas por la vida lastimando a nadie, cuando alguien te busca te encuentra. Aunque la mayoría de las veces eres dulce, te gusta poner las emociones por delante y ver más allá de lo superficial. Eres comprensivo, atento y muy empático, hay una parte de ti que siempre está dispuesta a ayudar. Tu corazón no se compara, porque su objetivo es sanar. Te gusta que las personas que amas estén bien y si está en tus manos ayudar no lo dudas ni un segundo.
Eres Cáncer, eso explica por qué puedes perder el control y recuperarlo en un abrir y cerrar de ojos. No siempre entiendes tus sentimientos, pero has aprendido a lidiar con ellos en las buenas y en las malas rachas. De hecho, esa es la razón por la que eres tan versátil. Al ponerte en el lugar del otro no tienes problema en adaptarte a su estilo de vida. Sin duda, pueden describirte como un ser que va a paso lento cuando se trata de entregar el corazón. No quieres terminar herido y por ello pones una especie de caparazón.
La Luna es quien siempre te trae con el alma de un hilo, es el cúmulo de sensaciones que te mantienen emotivo, triste, asustado y con toda la actitud del mundo. Si hay algo que podemos destacar es que todo lo das desde lo más profundo, no te detienes cuando se trata de complacer y esa es la razón por la que encantas a cualquiera.
Los nacidos el 30 de junio, son personas que tienen ambiciones claras, que no compiten con el de al lado. Al contrario, trabajan todos los días por superar su versión y si está en sus manos levantar a otro en el camino, no dudan en hacerlo. Son personas sensatas, no siempre son sus emociones las que deciden por ellos. Entre tanto, eres un ser perseverante, basta que se te meta una idea en la cabeza para no quitar el dedo del renglón. En realidad, no exiges mucho, te basta con saber que alguien te ama, amas a alguien, tienes un techo, familia y un trabajo que te gusta. Te caracterizas por ser ese tipo de persona a quien le gusta apreciar las pequeñas cosas, eso que el resto no ve y que puedes terminar conmovido hasta las lágrimas.
Desde luego, no todo es color de rosa en tu personalidad, hay ciertos detalles que frecuentemente te ponen entre la espada y la pared. Digamos que tienes momentos en los que no quieres saber nada de nadie. Dejas las cosas a medias, porque tu ánimo decae de una forma increíble. A veces, una canción, un mensaje o simplemente un recuerdo del pasado te puede hacer sentir terrible. La depresión te sigue todo el tiempo y aunque has sabido ganarle, se ha convertido en tu sombra. Otro detalle es tu mal humor, puedes llegar a ser tan temperamental que dices cosas muy hirientes. Dejas a las personas con huellas crueles para toda la vida. Esa es la razón por la que no deberían meterse de forma negativa contigo.
Tu símbolo astrológico es el Cangrejo, es gracias a él que siempre te lanzas al ruedo, aunque el corazón te tiemble de miedo. Es tu parte emocional, arrebatada, intensa y la que tiene sed de saborear la victoria. Tu elemento es agua, es quien representa tu espíritu libre, es tu parte renovadora, la que simplemente se deja llevar y que siempre busca la transformación. La Luna es quien te gobierna, de ahí que tus emociones son un completo descontrol, es tu parte femenina, materna. Es por ello que las personas que te conocen te consideran una linda válvula de escape.
Si has nacido el 30 de junio, eres un amante apasionado, pero no puedes dejar de lado la parte romántica y dulce. Puedes llegar a ser muy sensible, te gusta ponerte en el lugar de tu pareja y hacer lo que sea para llenarla de detalles, elogios y aventuras. Te gusta salir de vez en cuando de la rutina, pero también la estabilidad, eres quien honra el hogar. Para ti la familia es sagrada, esa es la razón por la que tu pareja debe aceptarla, es a donde siempre vuelves para tomar energía y seguir avanzando.
Eres como tu color de la suerte, el plateado, la combinación que se roba las miradas por su elegancia, por su misterio, por su parte luminosa. Así eres, una persona tranquila, con sentimientos bonitos, de esos que ya no se encuentran en cualquier lugar. Sabes qué hacer y qué decir en los momentos más vulnerables. Siempre tienes el don de levantar, de amar, de inspirar, no dejes que nadie te vuelva hacer pedazos.