Si has nacido el 6 de noviembre, sabes que la vida es bella, incluso con sus malas rachas. Has aprendido que los ratos amargos no son para siempre, y que hasta en esos momentos hay que intentar ver el lado bueno de las cosas, al menos aprender la lección. Sin embargo, eso no quiere decir que caigas en el positivismo tóxico, al contrario, sabes muy bien que si te tienes que enojar, llorar o gritar por algo, lo harás sin tantito miedo. Porque es parte de depurar el alma, hay que sacar todo lo malo que se aloja en el corazón, para volver a comenzar.
Eres Escorpio, así que tu tendencia es ver lo negativo a la primera, tu lado desconfiado es el que te muestra las banderas rojas desde un principio. La verdad es que ya no eres el mismo de antes, ya no piensas engancharte con algo que no vale la pena, si te hace llorar mucho más de lo que te hace sonreír, simplemente tú no tienes lugar en ese sitio. Eres muy valioso y lo sabes, ya no estás para lidiar con gente mentirosa que no tiene ni idea de lo que significa la lealtad. Al final, los engaños te han enseñado a valorar y a no conformarte. Nadie merece estar en un sitio en el que le roban la calma y las ganas de seguir adelante. Con los años aprendes a poner un alto, a no dejar que te subestimen.
La gente que te conoce sabe que no le temes a los desafíos, que cuando se trata de dejar claro lo que quieres, lo haces sin miedo al qué dirán. No dejas que los comentarios de gente que ni siquiera te conoce influyan en tus decisiones. A ti la única opinión que te importa, es la que ves frente al espejo, y vaya que con esa es más que suficiente. Eres el crítico más exigente, no te perdonas fácilmente y te castigas como si fueras de hierro. De vez en cuando bájale dos rayitas a tu intensidad, porque también te mereces descansar y huir de todo para volver con más ganas. Sigue trabajando en tu evolución, porque vas por muy buen camino.
Si has nacido el 6 de noviembre, tu generosidad se siente a kilómetros, te gusta dar de corazón y en silencio, nunca has sentido la necesidad de que te reconozcan por darle la mano a quien lo necesita. Realmente la gente valora mucho eso de ti, porque mientras puedes ayudar, lo haces. Sin duda, le haces honor a ese dicho de que no siempre recibes lo que das, pero siempre das lo que eres, y ahí es donde tu esencia lo comprueba todo. Al final, tienes muy claro que estás aquí para amar, para hacer el bien y que la gente mala siempre va a existir, pero lo mejor que puedes hacer es no engancharte. Sin duda, algo que detestas es la injusticia, no toleras verte envuelto en conflictos que no te corresponden, pero tampoco te vas a quedar de brazos cruzados si te das cuenta que la otra persona no tiene la culpa de nada.
Por supuesto, hay ciertos rasgos en tu personalidad que pueden considerarse bastante negativos. Digamos que cuando tu lado oscuro aparece, realmente no se apiada de nadie. Hay momentos en los que la frustración habla por ti, cuando quieres descargar todo tu coraje y tu parte controladora te hace segunda. Ahí es cuando todo el mundo te desconoce, porque desaparece tu parte bondadosa, la que siempre dice que sí y la que no pone límites. Detestas lidiar con gente inmadura, que no respeta tus procesos, justo ahí es cuando tu parte mandona y exigente, controla todo.
Tu símbolo astrológico es el escorpión, es quien simboliza persistencia, un toque de venganza y ese estado que te mantiene alerta, lejos de la gente mala vibra. Tu elemento es el agua, es quien simboliza la manera en que te dejas fluir cuando se trata del cambio, esa capacidad que tienes para reinventarte en cualquier ocasión. Tu planeta regente es Plutón, es sinónimo de dinamismo, de las ganas que tienes de salir a conquistar todo a tu paso. Por su parte, la numerología dice que tus números de la suerte son el 7, 9, 11, 17 y 22.
Si has nacido el 6 de noviembre, eres un amante incondicional, muy emocional e intenso. No te tomas el querer a medias, si lo haces es desde las entrañas, porque si sólo están dispuestos a entregar sus sobras, prefieres quedarte solo. Te gusta agregarle un toque de aventura a la relación, te preocupas por quien amas, por hacerlo sentir especial y darle su lugar frente al resto. Es más que evidente que no toleras la traición. Si alguien no está listo para entregarte la fidelidad que te mereces, es mejor que siga su camino y deje de hacerte perder el tiempo. Simplemente quieres un vínculo que te dé seguridad, que te inspire, te apoye y esté dispuesto a amar.
Eres como tu color de la suerte, el rojo intenso, el que habla de las personas relajadas, impetuosas, de las que les da igual el qué dirán y sólo se centran en sus objetivos. También es de los metódicos y misteriosos. El color que le hace honor y llena de sofisticación tu personalidad.