Qué increíble el corazón de Libra, que a pesar de tantos tropiezos, tantas lágrimas y tantas decepciones, sigue de pie, con el alma rota, pero con una sonrisa en el rostro. ¿Qué es lo mejor de salir con Libra? Tiene ese encanto natural que hace sentir cómodo a cualquiera. Libra es el acompañante que sabe cuando algo anda mal y no te dejará solo. Carga mucho peso dentro, pero no lo demuestra y esa es la más grande prueba de que su amor es superior.
Salir con Libra es un desahogo total, ni siquiera te das cuenta en el momento en el que te conviertes en un libro abierto, sabe llegar hasta lo más profundo de ti. No se conforma con conversaciones superficiales, siempre quiere más, es amante de ser el primero en descubrir secretos. No debes preocuparte, si le interesas pausa todo lo demás, quiere perderse en lo que sale de tu boca, pero también en lo que gritan tus ojos. Libra es sinónimo de equilibrio, armonía y encanto. Es una experiencia memorable, vas a recordar las citas a su lado el resto de tus días.
Salir con Libra es sonreír sin planearlo, te cautivan sus ocurrencias y la manera en la que se aventura. Disfruta de todo aquello que le agita el corazón, no necesita las cosas más ostentosas del planeta, lo que necesita es conexiones reales. Sí, es un loco romántico por excelencia. Al principio, se muestra tímido, pues ya han jugado con sus emociones y le aterra cometer el mismo error. Sin embargo, se derrite por los pequeños detalles: las flores, las charlas bajo la luna y las palabras bonitas.
Salir con Libra es dejar que todo fluya, no te asustes, no es de los que juzga. Libra es de los que escucha con atención, respeta tus miedos y tus inseguridades. Jamás se burlaría de algo que te duele y mucho menos se lo contaría a alguien más. Libra es leal, aventurero, emocional, un poquito inestable, pero no te va a mentir. Si te mira a los ojos y te dice que te quiere, debes creerle, no cualquiera atrapa su corazón. Y tú, ¿saldrías con un corazón como el de Libra?