A Aries hay ciertas actitudes que le molestan ¡y mucho! dentro de una relación. Este signo de fuego tan directo detesta que le lleven la contraria, y no tolerará que lo subestimen o critiquen en ningún momento. Vamos a ver lo que más molesta a Aries en una relación. Al carnero le revientan las faltas de respeto hacia su persona y cualquier tipo de injusticia dentro de una relación.
Tampoco soportará que se metan con los suyos y sabrá poner en su lugar a quien se desubique o tenga malas intenciones. Aries sabe muy bien cómo responder en caso de sentirse atacado y no dudará ni un segundo en cortar la relación si esta lo amerita.
Otra cosa que puede molestar mucho a un signo tan dinámico e impulsivo como este, es la falta de rapidez y la lentitud de su pareja. Aries no tolerará a alguien que se tome todo su tiempo para hacer una tarea. Necesita tener a su lado a alguien activo que no dude en accionar y resolver cualquier conflicto. Este signo es conocido por carecer de paciencia. Ante cualquier drama pierde fácilmente los estribos, lo que lo lleva a explotar, con reacciones que posiblemente lamente luego.
También le molesta la falta de tacto que tenga la otra persona. Si bien Aries parece fuerte e indestructible, es alguien muy susceptible que puede ser herido con facilidad por los demás. No tolerará los desplantes y el incumplimiento de palabra por parte de su pareja. Si Aries promete algo, lo cumple cueste lo que cueste. Aries es una persona de hechos y no tanto de palabras, y a su lado querrá tener un compañero digno de su confianza. Sin embargo, suele decepcionarse muy rápido al momento de descubrir que algunas personas no son lo que aparentan.
Otra cuestión que molestará mucho al carnero, será la falsedad y poca honestidad de su persona amada. Será capaz de dejarlo todo sin importar que tan antigua sea su relación. Ante el primer indicio de que su pareja no está siendo sincera ni valorándolo como se merece. Con Aries no habrá puntos medios, será todo o nada, y mejor que no le den motivos para corroborar que quien llevaba la razón… era él.