Ella es temida por mucha gente. Ya está acostumbrada. Nacer bajo el signo de Escorpio te crea mala fama de por sí. A veces lo prefiere, para que nadie se pase de listo. Su mundo se basa en extremos, en el todo o en el nada. Ella es radical en sus ideas y sí, a menudo también demasiado extremista. No concibe los grises porque cree que el gris es para la gente que no se moja con nada, para las personas que no se implican y que quieren quedar bien con todo el mundo. Ella sabe que no siempre se puede quedar bien con todos. Ella es Escorpio.
En el amor, necesita entrega total. Es fiel y cariñosa y cuando menos te lo esperas también detallista. Cuando ama, es increíble la forma que tiene de hacerlo. Sientes que atrapa de alguna manera y que lleva al séptimo cielo. De una Escorpio no te olvidas nunca, pase lo que pase.
Ella es celosa, mucho, y también algo posesiva. A veces, parece incluso agresiva en su forma de hablar pero es su manera de demostrar cariño y amor, de cuidar lo que considera “suyo”. Ella jamás se inventará esos celos de la nada. No está loca pero no es imbécil.
Escorpio puede adaptarse a cualquier cosa, es fuerte y tiene un carácter de mil demonios cuando se la trata mal. Sabe escuchar a la perfección pero también te dirá las palabras más duras cuando sea necesario.
Es curiosa, muchísimo, y no cesará hasta encontrar su lugar en el mundo. Ella sabe seducir, pone la miel en los labios y juega a la provocación constantemente y con todo. Es muy complicado no caer en sus redes, es muy complicado que no te embauquen esos ojos…